Feliz Domingo bellas,
Oshun es la segunda parte de la colección FDZ SS23. Son las piezas más pensadas para las altas temperaturas, y nuestras vacaciones. Todas tienen dos elementos en común; los materiales orgánicos de primera calidad y una feminidad y sensualidad inherente en cada detalle. Lleva el nombre de Oshun, ya que la honra y así a todas nosotras. Oshun es la Diosa Africana del agua, la abundancia y la sensualidad.
Por ello, tenía claro que el mar, el viento, el sonido del agua, la naturaleza en tonos dorados jugando en la hora mágica del atardecer, serían su escenario. Ariadna de nube de carbón y yo seríamos fotografiadas por Sira y Valentina en el Alt Empordà.
Para mí era importante que nos sintierais próximas, sé que os gusta e identifica ; mujeres reales, cuerpos reales. Y no hay mayor perfección que la belleza sublime de la imperfección. Ari lejos de un cuerpo standard, está absolutamente cómoda en el suyo, y encarna la feminidad y sensualidad de una forma tan hermosa que inspira más y más a creer en que ello es posible para todas. Por otro lado, yo, con mis 49 años y en climaterio, represento una etapa que supone una aceptación del “cambio” en nuestro cuerpo a veces difícil aún sea lo más natural y a la que toca honrar. Ambas representamos la diversidad, ciclicidad, y unicidad de nuestro femenino sagrado. No somos iguales. No somos perfectas. Somos mujeres y humanas.
Ambas decidimos alzar nuestra voz a través de nuestros proyectos para que el “SER, EN FEMENINO” sea un GOZO, un TESORO, un TEMPLO y un HONRARNOS.
y eso, es lo que hicimos cada una, con su propia personalidad y forma, en las fotos que iréis viendo. Jugamos y disfrutamos y sobretodo, “NOS PERMITIMOS”. Ese “PERMISO” del que siempre hablo, es en realidad, lo que lo cambia TODO.
Y es lo que os deseamos transmitir, como algo posible y hermoso.
Hace 5 años que encarné, de verdad, “mi permiso de ser” en mi cuerpo, y me cambió la vida. No hace tanto, pero no hay vuelta atrás. Cambié, la represión por la libertad, la tristeza por el Gozo y la Vida y el agradar a otros por el agradarme a mí la primera. Lo que siento hoy como Sandra es tan bonito, que lo deseo para toda mujer. Por eso estoy aquí. Creo que es posible con todo mi corazón. Y lo veía imposible, os lo prometo.