Kimono Anna i Martí. Feminidad y Maternidad.
Todo empezó por una tela… así empieza la historia de este Kimono.
Conocí a Anna de https://www.instagram.com/drimvic/, por esta cuenta, quizás ya la conocéis y sino os la recomiendo por su honestidad y sensibilidad contando historias que podrían ser las de cualquiera de nosotras y por contarlo de forma tan bella y tan verdad. Anna, habla desde el corazón.
Un día, ella empezó a seguirme a mí, un poco por lo mismo, éramos espejos, en nuestra sensibilidad, experiencias y forma de ver la vida. Y poco a poco esas líneas que nos escribíamos cambiaron de formato y empezamos a tener una relación de amistad como si nos conociéramos de toda la vida. No os podéis imaginar la cantidad de audios intercambiados y siempre, ayudándonos, en nuestros sentires y caminos muy sincronizados. Creciendo y compartiendo. Mudando de piel…
Y un día, así es la inspiración, al ver una tela, la que os muestro (rosa estampada) , me vino claramente la imagen de Anna. Y yo sigo este tipo de señales mágicas 😉
Bonita verdad?
Hacía tiempo además que quería hacer una prenda que integrara la maternidad y la feminidad, dos palabras grandes, muy unidas entre sí pero que a veces, cuestan tanto de integrar….. Muchas mujeres habéis llegando a mí, diciéndome que al ser madres os sentíais de algún modo, desconectadas y que la queríais recuperar.
Quería crear una prenda específica para la maternidad y su realidad ; No tenéis tiempo de nada!! y menos un espacio íntimo con vosotras. Anna me contaba como a veces, salía a la calle a pasear a Martí como podía pues no podía ni plantearse ¿qué me pongo? desde un sentido estético sino práctico y cómodo. Venga esto y listo!
También me hablaba de la lactancia , sintiéndose muy femenina por dentro. La lactancia materna, a mí personalmente, me parece de las cosas más bonitas y femeninas, con todas sus sombras y dificultades… Y me dio que pensar su sentir ; Se siente muy femenina por dentro, pero no por fuera, y sintiendo a la vez como un vacío, el de la Anna antes de ser madre, que ya no está…. y en muchos momentos, la echa de menos… Es un vacío real y necesita ser escuchado.
Además, lo que ella me contaba, lo he vivido con mis sobrinos. Anna, madre de mi sobrino Aran, ha sido el espejo perfecto. El hij@ pasa a ser prioridad absoluta.
La tela escogida para el Kimono Anna i Martí, era feminidad y Diosa absoluta a mis ojos, frente a la practicidad de la que me hablaba Anna. Pero seguí mi sentir y lo primero que me vino es, que fuera largo, que tuviera bolsillos ( imprescindible) y con un cinturón pero femenino que no quedará tipo bata de estar por casa pues buscábamos lo contrario. El cinturón fino y delicado en la cintura del Kimono, era perfecto.
Lo hicimos y me llegó la muestra…. me la puse, y no tengo ni idea de porqué… pero no me convencía… en mi adentro sentía, me falta algo y no sé que es…. No está listo. Lo colgué en el showroom y lo iba mirando…. Nunca fuerzo la inspiración, confío en nutrirla y ya llegará la respuesta y es así, llega de repente!
Entonces pasó algo muy curioso, mujer que venia al showroom, me preguntaba por ese Kimono, esa tela rosa estampada, se lo ponían y decían “me encanta!!! ¿ está disponible? “. Me sorprendía pues eran muchas pero mis entrañas no vibraban… Escribí a Anna y le dije lo que me ocurría, ella confío en mi intuición y el tiempo que necesitara….
Un día en una conversación, me dijo que todo el rato le venían tonos pastel a la cabeza.. quería suavidad, y pocos días después vi esta tela verde pastel y me enamoré . A la vez un pastel es arriesgado pero aquí mi cuerpo fue claro : SI! me decía… Hicimos una nueva muestra con este verde. Y cuando me lo puse dije, ahora sí, estás listo Anna i Martí….
En el shooting pude sentirlo, con un look muy sencillo ( top y short) y me sentí Diosa, a la vez tan cómoda…
Le dije a Anna que estaba listo y como su madre iba a verla a Estocolmo vino a buscarlo. Tengo que deciros que Carme, su madre, es un angel caído del cielo, tuve super conexión el día que vino. Y ….le entrego el Kimono Anna i Martí en verde con su bolsita, y Carme me pregunta justo por el kimono Rosa estampado , el Anna i Martí I , que yo había descartado. Yo no le dije que era el de su hija y nieto pero se lo probó, le quedaba espectacular y se lo llevó. Y ahí si se lo dije y nos pareció increíble. Además le daría la sorpresa a Anna, presentarse con 2 kimonos!
Pero justo cuando llegó el Kimono a Anna, estaba en el hospital, su cuerpo necesitaba mimos y cuidado… Carme, me escribió me contó como estaba Anna y me dijo ” Sandra pero dice ella que Avanti con el lanzamiento del kimono! le encantan y te escribirá!”. Eso para mí era imposible, lo importante era que se recuperara, además sentía y siento muchísimo cariño por ella y el Kimono no era importante ¿ Qué prisa había? Yo no sentía ninguna. Y era su prenda! Fue mi inspiración. También pensé qué curioso que su Kimono y Anna han necesitado lo mismo en la misma época ; Tiempo. Un ritmo propio, adecuado a las necesidades del cuerpo.
Ahora Anna está mejor, y le dije, te has dado cuenta? Y hoy, estoy totalmente convencida de que este Kimono nos trae un mensaje a todas, madres o no… ; Escucha tu ritmo, ése, el que tu sabes te hace bien. Y síguelo…Eso es nutrirnos, auto maternarnos y lo contrario es dejarnos, arriesgar cuerpo y salud. Es tan necesario, dejar culpas a un lado, y no sentirnos malabaristas para llegar a todo y a la vez a nada. Donde llegues hoy, está bien. El cuerpo que ha elegido nuestra alma, te dirá perfectamente ; hoy hasta aquí amor, ya estamos…
Anna i Martí es AMOR, amor en acompañarnos a nosotras, a nuestros hijos, pues daremos desde un lugar mejor , es amor a tus relaciones, y es respeto, respeto a tu sentir y tiempo. Y sí , es también feminidad, suavidad y Diosa del Olympo!
Gràcies Anna, Martí y Carme por haberme dado el regalo de la creación confiando en mi intuición y ritmo. Por la ternura que siento de los 3 y hacia vosotros.
Este Kimono tiene su propio mantra : “Estoy conmigo. No me pierdo. Soy mujer, soy Diosa y soy madre. Es posible. Sí.”
A todas las madres, Con amor, Zoé
pd: que no se me olvide, con el pin que tiene en el escote, facilita la lactancia a tu retoño 😉